Momento en el centro

Estremecimiento.
Sin llegar a ninguna parte
bebo el cielo
sentados los pies en el barro
de puro y alegre chapoteo.

Sin llegar a ninguna parte
me quedo
y parado vuelo
de no buscar nada
llegué al centro.

Desvariación

Nuestro camino es el amor:
no te exijas ni pienses
afloja las resistencias
embriágate de amor locura y poesía
recógeme

Locos poetas y ardientes doncellas
volando sin motor
a todos los paraísos
por el camino de las estrellas
Pirineos Santiago Finisterre Pigrim´s Tibet
perfecto Maithuna
Yoni que derrama surtidor sobre Lingam
vuelves a volar felix fenix
con el mantra del rey de los nagas
realizo el oro en tu palacio ovárico.

Los locos poetas de la flor del Tao
nadan las heladas olas revueltas
del fin del mar del fin del mundo
como pájaros incorporando el fuego
al sol del poniente.

San Juan de la Cruz dice
ni temeré las fieras y pasaré los fuertes y fronteras
amor
fuego interno que seca la locura
hasta que arde sin humo ni pena
luz del corazón
guía interior que no mira atrás ni piensa
pues se alimenta del chorro
que brota de su propia abundancia
que deja desbordar.

Coniunctio

Sexo de pavos reales y arcoiris
espléndido y brillante
como el feliz árbol
que bebe insaciable de la fuente
extiende en el cielo las ramas
se adorna de hojas
amorosamente indica el espacio
con su presencai lo muestra y lo revela
a todos los extraviados embotados y ateridos.

Como los amantes desbocados
muestran la unidad
pues en sus bocas se saborea
la música de las esferas
en sus sexos la velocidad vertiginosa
del impulso de las galaxias.

Por eso aprendemos a cabalgar un deseo infinito
de infinito deseo
luminoso deseo que ilumina la opaca oscuridad.

Sin dejar que deslumbre lo tomo
en las manos lo amplio
rumbo a los inagotables horizontes
donde tierra y cielo coyundan.

Sueño de la selva

Chocolate amargo
como un rito que atraviesa el tiempo
y en una selva me lleva a tí.

Soy feliz pero extraño en un mundo distinto
lleno de desconocidas precauciones
camino sin preparación lleno de una inspiración desconocida
el tiempo me sugiere un poso
intangible cosecha que no sabría ponerte en las manos.

Aunque como siempre grave y solemne
sonrío pues mi pecho se expande y goza
en la perspectiva de los variados paisajes que atravieso.

Guía

No mas escucha que el silencio
ni mas foto que el entrecejo
que crece en un canal
por donde caigo al infinito
y esa caída es el vuelo
dulce vuelo del misterio del silencio
aunque hable
hablo encima del silencio
la guerra y el desasosiego brutal
pues debajo de ellos está el silencio
el silencio es el maestro
y el discípulo que dulcemente aprende
éste amor salvaje como un temporal inagotable
donde asciendo ese centro
que está en todas partes y nigún sitio
escucho el silencio
mi guía.